Fabiola Lairet ofrece consultoría gastronómica dedicada
a profesionalizar la cocina, tras años de experiencia de
creación en el sector.

Alimentar es una manifestación de amor y de generosidad, cuidando a los comensales como se haría con la propia familia. Esa es la esencia de un método que propone conservar la paz y la armonía en una cocina, claves para el éxito de cualquier proyecto gastronómico.

La atención a los detalles, por pequeños que parezcan son determinantes y se expresan en la calidad de los alimentos, en la estética e incluso, en la calidez del entorno, para crear experiencias auténticas. El método de Fabiola nace en la cocina pero traspasa sus paredes; se inspira en la figura del director de arte para ejercer, desde la creatividad, un cambio real en las dinámicas del sector gastronómico y de la restauración. Capaz de reformular un plato, diseñar un sabor, mejorar una carta o intervenir en aspectos estéticos.

El respeto por el producto de calidad está en el centro de muchas decisiones, o en la mayoría de ellas y es algo que ha aprendido en su extensa experiencia con la cocina japonesa, de la cual conoce sus valores, creencias y domina su metodología. Es también el producto la vía más directa para entender la multiculturalidad de Fabiola Lairet, nacida y formada en ella, y constantemente enriquecida gracias a sus múltiples viajes.

La humanización de la gestión es otra de sus claves. Se da voz y espacio al equipo de trabajo, convirtiéndolo en socio indispensable del proyecto, sea cual sea.

Fabiola Lairet fortalece las capacidades y conocimientos de los responsables de cualquier proyecto gastronómico y de su equipo mediante el concepto de Cocina Escuela.

El resultado es el éxito del proyecto, basándose en los valores de una cocina honesta, robusta y resiliente, capaz de reaccionar a los cambios y renovarse según las circunstancias del entorno, las necesidades y las tendencias. Un negocio con un equipo consolidado reduce significativamente la rotación del personal, generando una confianza que traspasa la cocina. De hecho, es capaz de replicarse a escalas mayores, algo especialmente válido para negocios con varios restaurantes y grupos de hostelería.

Experiencia vital

Formada en Japón y en EEUU, es una de las pocas sushichefs en el mundo con el Certificado oficial del Sushi Skills Institute y AJSA (All Japan Sushi Association). Ha cultivado su afán incansable por aprender y mejorar a lo largo de su vida. Desde niña, en su ciudad natal, Caracas, la cocina multicultural de los años 80 la marcó. Después vendrían el auto-aprendizaje, los viajes, la vida en España, la influencia californiana, los cursos de cocina en Los Ángeles, la especialización y la inmersión en Japón, donde aprendió de la mano de su maestro, Andy Matsuda. Ahora, con absoluta claridad, traslada a sus clientes su expertise y todo su carácter: amable y firme por igual.

Fabiola es como ella mismo dice ingeniera de profesión y gastronomista vocacional. Después de trabajar como ingeniera, su vida da un giro cuando ella y su familia se trasladan a vivir a España en 2006. Su curiosidad y ganas de emprender la llevarían a desarrollar, de una manera profesional, una pasión que siempre había tenido: la cocina. Dió el salto a la cocina asiática, de la que se enamoró, hasta que encontró su sitio en la cocina japonesa.

En 2010, junto a su familia monta su primer restaurante: Monster Sushi. Después vendria Robata, con una propuesta japonesa elegante y diferente.

A esa dedicación por el negocio familiar le siguió el entrenamiento a su equipo hasta convertir ambos negocios en escuelas gastronómicas para sus empleados.

En 2021, Umai Group adquiere sus negocios pero su vinculación con la cocina queda lejos de terminar, más bien todo lo contrario.